EN EL AMOR ETERNOS


No volverán los versos otro día

pues ya se quedan,

de nuevo enamorados,

viviendo entre la piel,

de carne saturados.

en carne viva alados,

sangrando en las heridas,

amando a lo que viva.


Un solo corazón se ha despertado,

hasta la piedra ha roto,

para encontrar al otro,

que despierte del sueño,

donde se encuentra absorto.

Una sola pasión buscando a otra,

en el inmenso vacío,

donde la vida llora.


Congelose el agua al contemplarlo,

se durmieron los álamos,

del amor desprendido,

en la brisa mecido y amainado,

cantan las hojas,

de murmullo su canto,

hablando al horizonte,

despertando al insomne enamorado.


No volverán los versos de aquel día,

ni la voz cantarina de sus rimas,

porque ya están soñando,

con volver a ser niños,

cautivos en los pasos del camino.

Volando quedó el verso,

bailando va la rima,

y el amor es secreto y se desliza.


La dura oscuridad se ha desvelado,

cayeron los desvelos,

y las errantes sombras,

al fin se descubrieron.

La dura piedra, torna en arena,

donde el amor se acuesta,

en la quietud fantástica,

de las olas serenas.


No volverán los versos otro día,

pero serán eternos,

en el amor grabados,

a fuego en las pupilas.


A.L. (ángel l. pérez)


NO SOY LO QUE ESCRIBO...SOY, LO QUE TÚ SIENTES AL LEERME

(anónimo).

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07/05/2021

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