Poemas y pensamientos

  SOBRE EL LIENZO... Calma chica en la mirada. Ira, en airados gestos. Verdades en las sonrisas, en unos labios sinceros. Y un pálpito, que suspira, en un corazón, de anhelo. Canciones que hablan de lizas. Otras, de amores y besos. Olores que son premisas, de perfumes venideros. Y un soplo, que es una brisa, que acaricia los deseos. Ave Fénix, que renaces, de polvorientas cenizas. De los rescoldos la vida, que emerge como los géiseres. Palabras, que al ser veraces, emanan del alma misma. Mares, montes y colinas. Lagunas, ríos y riachuelos. Voces, sonidos y truenos, en el silencio, siseos. Besos y tiernas caricias, embadurnadas de anhelos. Amores en el sosiego, de vespertinos momentos. De instantes, mágicos sueños. De soñar, grandes proyectos. Y un sinfín de recovecos, que dejan los sueños viejos. Y sobre el eterno lienzo, de amores, que son la vida. Plasman en su estambre gestos, de cada vívido intento, de llegar hasta la cima. Pintores,

  AURORA ENTRE LAS SOMBRAS Volverán con la aurora, con las pupilas nítidas. En la metamorfosis, de la existencia misma. A lomos, siempre alados, volando hacia la cima, serán, versos ahora. Viajeros en las sombras, vendrán como chubascos. Sin nadie que los nombra. Como entes en los halos. Extendiendo los brazos, de lluvias y de barros. La vida será otrora. Famélicas las bocas, sedientas, como grietas. De amores que las nombran, sin nombres entre rejas. Y el tiempo, que es ahora, hambriento de recuerdos, devorarán las sombras. Fanáticos de sueños, amarán como orates. Removerán la sangre, de heridas que desbordan. Y un fantástico anhelo, que en el tiempo, es ahora. Como aves trovadoras. Caciques de la vida, maniatarán los sueños. Con cinchas de codicia, retorcerán lo nuevo. Y el alba, hará justicia, cuando Sol, sea de nuevo. Quemará al carcelero. De luz serán los días, cuando el amor sea nuestro. Y el odio, será envuelto, para que quede y

  ETERNO Y EFÍMERO Bebe la vida del sueño, para alcanzar lo que anhela. De la magia se alimenta, y en el misterio se adentra. Para beber del secreto, donde la verdad se encuentra. Caminos hay, como sendas, ocultos en la maleza. Donde los mundos se ocultan. Donde la vida es secreta. En el fondo de las simas. Donde el abismo te mira. Bebe la vida del néctar. De la inescrutable esencia, del centro, donde se alberga. Y bebe de lo que inspira, para alcanzar la conciencia. De los demás se alimenta. Albergues son los misterios, donde se cobija el tiempo. Donde lo arcano es la fuente, que alimenta a los sedientos. En el fondo de la mente, vive la vida que siente. Amor en el Universo, donde lo insondable habita. De donde bebe el aliento, del corazón que palpita. Cada suspiro es secreto, en el inhóspito tiempo. De la semilla el amor, que crece, como el talento. Y en la verdad el calor, porque en el frío está muerto. Bebe la vida del tiempo, que sie

  ESQUIRLAS DE TIEMPO Cataratas de recuerdos, que arrebatan el presente. Un ciclón de pensamientos, que embeben a cada instante. Y recuerdos pasajeros, como momentos fugaces. Y así, se van sucediendo, como profusas imágenes. Que como jalones quedan, en la memoria, sin tiempo. Amor, que deja su impronta, como un indeleble sello. Canta el gorrión sin desmayo. Grande, en un pequeño cuerpo. Y sus trinos van quedando, prendidos en el recuerdo. Y los ecos, son gramófonos, que llaman al mundo entero. Torrentes de pensamientos, que acuden como posesos. Voces son, como violines, que desgranan sentimientos. De tristezas, un rimero, y de alegrías, momentos. Amores entre guedejas, cirros de nubes sin tiempo. En apartadas riberas, donde habitan los que fueron. Y en los bordes de la vida, van quedando, como rimas. Cataratas, que son rías, como esquirlas de otros tiempos. Envueltos en fantasías, de mágicas voces, llenos. Arcanos sonidos viejos, acompaña

  NACE EL AROMA Inmerso en la pesadilla. Vagabundo entre los sueños. Viaja el ser, entre los mundos, con las alforjas ahítas, de alegrías y penurias. Salva el escollo quien lucha. Pensamientos que navegan. Y sensaciones que emergen. Sentimientos que amanecen, cuando las vidas se entregan. Una pasión que prospera, en un ser que se estremece. Inmerso está entre las vidas. Abraza carnes y huesos. Arrebata la estulticia, con la fuerza del deseo. Su poder no tiene freno. Envuelve a lo que palpita. Quiere el amor ser el dueño, de todo lo que respira. Su deseo es infinito. Y su pasión, no se achica, aunque le doblegue el tiempo. Su brazo alcanza a la vida. Vive el amor en la rima, que desgranan los sentidos. Desbordante travesía, entre inaccesibles simas. En la calma, es un tifón. En la tormenta una brisa. E inmerso en las alegrías, vuela, como ágil halcón. Su pasión es dar la vida, cuando el corazón palpita. De sus pétalos de flor, nace el arom

  SOÑANDO UN SUEÑO Soñar que el sueño despierta. Soñar que se está soñando. Y soñando, van dormidos, los pasajeros del tiempo. Sueño, que soy el testigo, de un Universo pequeño. Soñando vivo en silencio. No puedo soñar con ruido. Y al soñar, voy entendiendo, que es un sueño lo que vivo. Y soñando en el olvido, van pasando los recuerdos. Amar, soñando que vivo, en un profundo misterio. Y al despertar, voy soñando, que soñando sobrevivo. Sueña el pobre y sueña el rico. Cada cual, sueña lo mismo. Uno soñando que es más. El otro, al dinero adicto. Y así, soñando en soñar, pasa el tiempo, cuál soplido. Cuál contenido suspiro. Amar, soñando en amar, con el alma y los sentidos. Grandes sueños, viejos mitos. Beber del néctar soñando. Vivir con soñar, pensando, que al vivir, sueño contigo. Ángel L. Pérez ® SOY LO QUE ESCRIBO Y LO QUE TÚ SIENTES AL LEERME https://www.poemas-del-alma.com/blog/usuario-188210 https://www.ivoox.com/podcast-angel-l-pe

  PINTANDO EL TIEMPO Cambia el sentido del viento. Como cambia el sentimiento, ante el placer y la pena. Cambia el color, cuando el día, la claridad va perdiendo. Y el tiempo, pinta los días, con colores de acuarela. El verso cambia la rima, para dar ritmo a la estrofa. Cambia el verbo, si es amor, o es un gesto de zozobra. Y, así, va cambiando el son, al cambiar la melodía. Torna, del verde al marrón. Amar, en tiempos revueltos, cuando cambia la armonía. Cuando se encrespan los vientos, con la fuerza de la ira. El sol, a lo verde, agosta, aunque, sin él, no habrá vida. Torna el griterío en silencio. Cambia la flor, que es semilla. Y, al cambiar, la noche en día, los seres se desperezan. Como cambian las orillas, de las transitadas sendas. Así, si el tiempo claudica, torna el sueño en pesadilla. Amor, que el tiempo no cambia, cuando permanece el fuego. Si no tornan en cenizas, las brasas, que arden por dentro. Amor, que es la melodía, que ven

  ENTRE DUDAS PASAJERAS Entre dudas se concitan, realidades y certezas. Entre cruces laberínticos, y encrucijadas de sendas. Diatribas que precipitan, en aludes variopintos. Duda el ser, porque es la duda, la que sueña la verdad. Y en ese intenso dudar, busca el sabio, la certeza. Que no encuentra la pereza, ni la propia realidad. Caminaba entre las dudas, que acechan el pensamiento. En transitorios momentos, cuando te asalta el pensar. Cada paso es un hollar, que ahonda en los sentimientos. No sabiendo la verdad, se va el tiempo consumiendo. Y las dudas, son el centro, de la propia realidad. Vaga la duda, sin más, como deambulan los vientos. El amor, pinta los lienzos, de las turbulentas vidas. Mientras la duda se achica, cuando el amor es intenso. Y ya no caben las cuitas, en el etéreo concierto. Un corazón se desborda. Y una verdad se desvela. La duda, que es pasajera, cruza la verdad, y la aborda. Y el camino se desdobla, en estelas

  DE LA VIDA, QUE ES EFÍMERA De la corriente que arrastra. Al abrazo que sosiega. De la caricia que calma. A la brutal pesadilla, que las entrañas altera. De la descompuesta ira. Batel, que a la mar se entrega, surcando en él, su aventura. De las olas, su violencia. Al empuje, que le impele. De su frágil estructura. Carne líquida que hiere. Una flor, de una semilla, se yergue, como buscando. La luz, que alumbre su vida. De la tierra, que es un bálsamo. A la belleza infinita, de sus refulgentes pétalos. De la memoria, que es tímida. Al recuerdo más ufano. Del amor, que todo inunda, en la fuerza de los tálamos. La acariciadora brisa, que ofrecen límpidas manos. De un aluvión de promesas. Al despertar, de un letargo. De la extremada pobreza. A la avaricia insaciable. Y el amor inacabable, de la infatigable Tierra. Amores en el zaguán, esperando, como esperan, las arenas, a la mar. Del sentir, que al ser mortal, A la vida, que es efímera. Amo