AMANECE ENTRE PENUMBRAS



Amanece entre las sombras,

Y los cárabos se callan.

Como nacen entre sábanas,

despertares de los sueños.

Ya entonan las alondras,

sus trinos. Y los jilgueros.

No se detienen las cábalas,

ni se rinde el sentimiento.



La vida, que ama y perdona,

también fustiga y condena.

Como los granos de arena,

que se extienden como alfombras.

Y las luces, que redoblan,

como las briosas campanas.

Iluminan los amores,

que entre las sombras se aman.



Parte el velero entre brumas,

impelido por las olas.

Se dibujan las espumas,

en la quilla que las corta.

Esbelto como la cúspide,

de una elegante atalaya.

Y en su vital singladura,

los mástiles, al cielo miran.



Se va alargando la sombra,

de los verbos que caminan.

Persistentes se desdoblan,

y como brazos se estiran,

al ritmo de quien suspira.

La luz, torna cegadora,

cuando el Sol abre las hojas,

de sus ardientes pupilas.



Amor entre los espejos,

que atentamente nos miran.

Con los párpados abiertos,

para escudriñar las vidas.

Y entre sus vivos reflejos,

van llenando las pupilas,

de imágenes, que son versos.

Su mirada es cristalina.



Parte el batel entre sueños,

del timonel, que suspira.

Rumbo a aquel hermoso puerto,

donde su amor, vive y vibra.



Ángel L. Pérez ®

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04/10/2023

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