Poemas y pensamientos

  MOMENTO No hay pasado y futuro. Solo el instante mismo. El viviente momento. Una fracción de tiempo. Un soplo, que se vive. En un sutil suspiro. En ese sentimiento. Que, aflora en un instante. Se muestra, tal espíritu. El momento presente. Un fugaz fogonazo. Una chispa, de fuego. Es, el ágil latido. Vivido. En ese instante mismo. Del espejo, el reflejo. Mostrado en un segundo. El matiz, que te abduce. La emoción de un latido. Un parpadeo es la vida. Un brillo, que se escapa. De las aguas de un río. Y, un nítido quejido. Que, en un instante, llama. A un pensamiento ínfimo. Tal, ese miedo súbito. Que, en un instante íntimo. La vida se conmueve. Un salto en el vacío. Una fracción de vértigo. En un nanosegundo. El latido furtivo. Del amor, que se acerca. Un temblor, cosquilleante. Que, en el vientre, aletea. La pasión de un instante. ¡Qué, atenaza el instinto! Un momento, un suspiro. Ángel L. Pérez ® SOY LO QUE ESCRIBO Y LO QUE T...

  MELODÍA EN OFF Canciones a media voz. Melodiosos son los ecos. De las voces, del recuerdo. Que acuden, a viva voz. En camufladas imágenes. Sin saberlo, en el instante. Al ritmo del pensamiento. Se suceden los momentos. Precipitados torrentes. Y, en sus sonidos, en off. Se oyen, pero sin verles. Los ecos, que antaño fueron. Melodías, que se oyeron. Revestidas de esperanza. Entre, imágenes, que flotan. Amores, que siempre fueron. Tonadas, de viejas coplas. Acudiendo, como estrofas. De un poema, a media voz. No son latidos, son voces. Emitidas, desde el mundo. Que, vibran, en lo profundo. De silentes corazones. Son, los viajeros amores. Depositando, sus sones. Y, van quedando dormidas. Las, atávicas melodías. Que, sonaban, como golpes. Sobre, las soñadas vidas. En sus núcleos, y sus bordes. Corazones, que son nobles. Besos, que suenan sin nombre. Sobre, la piel y los huesos. Amando en off, como ecos. Venidos, para ofrecerte. El amor, q...

  LA TELARAÑA Atrapada en la tela. La mosca se rebela. En el recuerdo, el hombre se debate. Una red invisible. De invisibles alcances. En su mágica trama, le rodea y le atrae. Todo queda sujeto, al albur de la trampa. Esos hilos te alcanzan, donde quiera que estés. La neblina de sueños, en la mente te envuelve. Como alas gigantes, tapan la desnudez. La inmaterial sustancia, que alimenta y anima. Rigurosas sentencias, que condenan y obligan. Empapa el intelecto. Como una lluvia fría, congelando su ser. En los mil pensamientos, que rodean la idea. Corpóreas las esencias, abrazan la intención. Alargando sus brazos, en la dura pelea. Buscando la razón. Se ha quedado sin huella, la pisada que alienta. Sin nervios se han quedado, las intenciones muertas. Un soplo se ha perdido, en la fiera tormenta. Un suspiro ha salido, sin esperar respuesta. Infinitos tentáculos. Como una inmensa rémora. Se aferran a los cuerpos, libando sus esencia...

  DESNUDANDO CORAZONES Vístase el verso, de alma. Y de amores sus esencias. Tal, como visten las letras. De la canción, que embelesa. Y, desnúdese el poema. Para sentir, lo que tapa. Se descubre lo que oculta. Lo que enmascara, reluce. Pues, se abren las ventanas. Del corazón, que es el alma. Donde la vida, hace nido. Revestida de sentidos. Se visten y se desnudan Despojándose y cubriéndose. Con el manto de los sueños. Para que, viva el deseo. Que, a la luz, sale sin miedo. Envuelto, a veces, en niebla. Otras veces, de luceros. Desnudando corazones. Va el amor, libre y sin miedo. Ahíto de sentimientos. Pletórico, de lo que anhelan. Las almas, que arden por dentro. Y, en su titílenle sueño. Vive, la vida, lo más bello. Los corazones, desnudos. Se muestran, sin subterfugios. Tal, como almas mensajeras. Llevando, misivas bellas. Son, corazones sin prendas. Ni adornos, sin abalorios. Y, penetrando en las carnes. En la sangre y en los órgano...

  MALVADOS... Si el malvado fuera trigo, con segarlo bastaría. Más su apariencia de humano, le salva de la guadaña, que sus miembros cortaría. No se oculta el delincuente, cuando sabe que está a salvo. Al revés, se pavonea. Despreciando al que no sabe, de sus furtivas andanzas. Ajenos en su ignorancia, aplauden sus felonías, Inmersos en su rutina. pensando que la riqueza, de los que ellos eligieron, beneficiará sus cuentas, llenará sus monederos. Con guantes de terciopelo, tejen sus redes los listos. Y con astucia consiguen, que los que aplauden sus vicios, aparezcan como amigos. Conscientes de la ignominia, y su avaricia sin freno, creen que fueron elegidos, para llenar sus bolsillos y vaciar los del resto. Subidos en sus poltronas, y mirando de esta guisa, observan a los de abajo, como si fueran hormigas. Yates de metros de eslora, casoplones de película. Viajes, fiestas y cochazos, joyas, ágapes y fincas. Cotos de caza, prebendas...

  CALEIDOSCOPIO Multicolor, caleidoscopio. Es la vida en su crudeza. Y, multi rostros, enseña. En su eterna inmensidad. Variopintas sus facetas. Variada, intensa y locuaz. Los recuerdos se amontonan. De multicolores prismas. Y todos, quieren entrar. A la vez, como mucha prisa. Se acumulan, como cirros. En su inmensa variedad. Quiere el amor, ser el único. Al encontrar, su gemelo. Y, no, un inmenso rimero. De corazones heridos. Quiere, en su ser, inequívoco. De su alma mater, prisionero. Calidoscopio, que, enseñas. En tu efusión de colores. Todas las posibles caras. De la versátil conciencia. Y son, tus facetas múltiples. Las que, lo que falta, enseñan. Calidoscopio de amores. Donde, los recuerdos viven. Junto, a los vivos deseos. Que, en la pasión, enloquecen. Son, amores, que amanecen. En los primeros albores. Van sembrando nuevos rostros. Nuevos son, los que aparecen. Como nuevos, siempre crecen. En caleidoscopios viejos. Son, tan ve...

  CENITALES PUPILAS Amores entre las cejas. En las atentas pupilas. Iluminando a los ojos. Que, se abren, tales luces. Cenitales, que nos miran. Los amores viven cerca. Melodías, son los ojos. Cuando miran sin prejuicios. Y, son verdad, los que aman. Con, amor, sin hacer juicios. Con la intensidad, del mar. Que, besa, amble la orilla. Son las pupilas, los faros. Alumbrando, lo que ven. Van, dejando las semillas. Para, luego, florecer. Acariciando, a quien mira. En su interior con placer. El reflejo de la vida. En las pupilas, se ofrece. Donde los demás se miran. Sí, el magnetismo es real. No se cansa, de admirar. Tal, como a la flor se mira. Pupilas, que hablan de vida. Y, de amor, más sin palabras. Tal, como inmensas, fogatas. Son sus llamas, como estelas. Pues, clamorosas, nos llaman. Mágicas son, como estrellas. Las vidas son las pupilas. Cenitales, como fugaces. Estrellas, que cruzan. Los espacios siderales. Y van, dejando ilusione...

  ATRAPADAS EN EL TIEMPO Sucediéndose los días. Tal, como gotas de lluvia. Van dejando, notas nítidas. En el voluble recuerdo. Con matices de momentos. Impregnados de memoria. Quedan, así, como historias. Atrapadas, en el tiempo. Días, que, a veces, rebotan. Con feroces realidades. Y, en el tiempo, diseminan. Sus, deshilachados flecos. Entre, los ardientes huecos. Y, sus esencias depositan. En los maltrechos cerebros. Poblados, de intensas dudas. Atrapada, está la vida. Entre, realidad y sueño. Mezclada, con fantasías. Que, edulcoran las ideas. Siendo amantes los cerebros. De, adentrarse como sombras. En las simas, más oscuras. En la red de los recuerdos. Presas están, esas vidas. Que, sometidas al verbo. Visten, de ensueños, el día. Fluyendo, como cometas. Hacía, lugares, que son. Tal, como inmensos desiertos. Atrapadas, siempre quedan. Entre lo real y lo incierto. Caminando, como reas. De sus propios pensamientos. Entre barrotes, se ol...

  CLAMA LA VIDA Las palabras se desgranan. Granos, de una misma tierra. Semillas, que se sembraron. Para, que crezcan erguidas. Sonidos, que en tallos cuelgan. Tallos, de gargantas secas. Claman, los hijos, de quienes. Vivieron entre las verjas. Con las voces de otros mundos. Llegando, para que aprendan. Quienes, mirando a otro lado. No ven, ni lo que está cerca. Y, en esas voces, que claman. Va el amor, entre silencios. Para, avivar las conciencias. Que, viven entre trincheras. Así, se van sucediendo. Tales, rayos de tormenta. No creas, que vengo solo. Me acompañan, quienes piensan. Calmando, nuevas gargantas. Para, encontrar a los otros. Que, entre realidades, sueñan. Claman, las vidas, sin tregua. Amor que clama al sentirlo. Pues, sentir, es su experiencia. Clama, al fértil sentimiento. Y, al pensamiento, que medra. Gargantas, que se fundieron. En el grito, que las lleva. Versos libres, que clamáis. Para, que el mundo amanezca. En la ...