Poemas y pensamientos

  AMOR VESTIDO DE GRIS Bordeando la verdad, vive el necio en su estulticia. Y vuela con la obviedad, escondido en la sonrisa. Y en su ufano caminar, la apariencia se adivina. Medra en las aguas tranquilas, y sonríe sin parar. Cree el estúpido que es amo. Que, ser vulgar, es ser auténtico. Y cree, que lo sigue siendo, aunque falte a la verdad. Cree, ser señor de los reinos. Dueño se cree de la Tierra. Y no sabe que refleja, la incongruencia, nada más. La flor, la verdad nos muestra, en su sobria sencillez. Y en su esbelta solidez, se descubre la belleza. No se viste de riquezas. Ni presume, solo muestra, la verdad, que es su quehacer. Bella es, por naturaleza. Piensa el necio que es profeta. Que es sabio en su estupidez. Y en su mente de oropel, solo es real su cabeza. Y aunque su palabra es huera, sus gestos son de grandeza. Cree ser señor de las letras, de su ignorancia, esclavo es. Entre las razones baila, el bailarín infeliz. Y reclina su

  EN LA VITAL PLENITUD Despertar entre los sueños, que revelan lo secreto. Amanecer en las sombras, que las luces van rompiendo. Y en la claridad sentir, que parece más pequeño, el mundo en su devenir. Vivir sin soñar despierto. El corazón de la Tierra, que palpita en sincronía, con los seres que la habitan. La vida que se desliza, por las laderas del mundo. Pensamiento vagabundo, que vacila entre las grietas, de los rincones oscuros. Despertar entre los sueños, de perdidas ilusiones. Y ver el amanecer, con la belleza que extiende. Que se extiende por doquier. Y sentir el renacer, de aquellos bellos momentos. Sutiles son los recuerdos. Sobre los pasos volver, de los caminos hollados. Vivir de nuevo el pasado, y volver a renacer. Y en los apartados márgenes, donde se escribe el ayer. Volver a instantes amados. Sentir la vida en las sien. Despertar entre los sueños, entre mágicos olores. Y soñando ser los dueños, de aquellos viejos amores. D

  EL ABISMO NOS MIRA El vacío que nos mira, con los ojos del orate. Y el abismo que respira, en el destino insondable. Y un corazón que suspira, por otro que al tiempo late. La canción que te suscita, un amor, que fue cobarde. Y una vida que palpita, ante un hermoso paisaje. La flor, que al fin se deshace, como se esfuma la dicha. Amor, que flota en el aire, mientras se escapa la vida. En las plumas de las aves, vive latente la brisa. Y en los mares, al socaire, nace el abismo que mira. Canta el verso ente las rimas. Y las palabras son aire. Como la vida es la brisa, en una pasión que arde. Y en las noches de vigilia, late el amor, que es de carne. Amores en el desván, entre los recuerdos frágiles. Presos, sin sol y sin aire, en un vacío impenetrable. Aquellos, que fueron nadie, entre mágicos paisajes. Amor, que es reo del azar, flotando en busca de alguien. Ángel L. Pérez ® SOY LO QUE ESCRIBO Y LO QUE TÚ SIENTES AL LEERME https://www.po

  LUCES EN LA OSCURIDAD Ya no canta la mañana, replegada en su nostalgia. Es la luz que se acobarda. Son los ecos que se apagan, de las transeúntes almas. La oscuridad, la amenaza, blandiendo su larga espada. Y, ya no trinan, ya no hablan. Vuelve la voz a ser dueña, del silencio que la atrapa. Y son versos sus palabras, pintados con la esperanza. Ya redoblan las campanas, y se repliegan las sábanas. Es más diáfano el camino, que conduce a la templanza. Se va vistiendo el destino, con las ropas del mañana. Y las bellas luces bailan, entre las límpidas aguas. Ya se visten las luciérnagas, en las noches de las sábanas. Y los almendros florecen, entre el hielo que amenaza. Llega el amor, que se baña, en los bálsamos que sanan. Y ya trinan las alondras, en la inmensa claridad. Los versos al amor llaman, con la voz de la verdad. Ya de las esencias liban, los amores del mañana. Y va llegando la noche. Y la oscuridad se palpa. El rostro asoma lo osc

  LA VIDA, COMO UN ESPEJO En los brazos de Morfeo, se acunó el nervioso espíritu. Las aguas, como un espejo, quedaron, como en silencio. Se apaciguaron los ímpetus. Y se espesaron los sueños. Y cedieron los recuerdos, ante el sedante misterio. Son caminos, como estelas, que van dejando las vidas. Plasmadas como secretos, en la magia que las lleva. Y sin rumbo se deslizan, como perdidos veleros. No vuelan, solo caminan, entre realidad y sueños. Níveos cabellos salpican, la negritud de sus vellos. Y las palabras se achican, recortando sus anhelos. Pero, la vida se aplica, en dar sentido a su verbo. Para que sea amigo el tiempo, de la esencia que respira. Se va espesando la vida, entre el proceloso tiempo. Y se mezclan las desdichas, con el gozo del deseo. Y así, se vence la arritmia, que altera el preciado sueño. La mente vive cautiva, en los vaivenes del sueño. Amor entre los espejos. Entre los reflejos sueños. Y en las almas cristalinas, el

  TORRENTE ES LA VIDA Torrente es la vida. Masa cristalina, de agua que se pierde. Huracán que arrastra, en súbita caída, la roca más fuerte. Y en el lago amansa. Y en el mar se pierde. Entre fisuras la vida. Entre las rocas se yergue. Y nace como una rosa, de múltiples tonos crece. Y entre grietas diminutas, eleva el rostro y nos mira. Un torrente es su caída. Y en las corrientes fenece. Torrente es la vida. Que con fuerza arrastra, gozos y penurias. De amores se adorna. Viste de esperanza. Se oculta y se engaña, con falsas liturgias. Y en manos del tiempo, va dejando briznas. Amor que reflota, con fuerza inaudita. Que rompe las reglas, que ordenan las vidas. La vida es torrente. Es calma y tormenta. Diversos colores, que sus pieles tintan. De emociones, plena. De inmensas aristas. Los surcos profundos, que sus pasos pisan. Y en la Luna llena, cuando el tiempo alisa. Va soñando el verbo, junto con la vida. Y el mar se la lleva. En

  AMOR Y MIEDO Miedo que al ser atenaza, con el dogal del misterio. Y en su infeliz cautiverio, vive preso de su ego. Miedo, que el tiempo amenaza, verdugo, en la sombra, atento. Conviven al mismo tiempo, vida, temor y esperanza. Se van quedando en silencio, las penas y los anhelos. Enquistada la esperanza, envuelta en viejos deseos. Mientras brilla la belleza, entre las grietas del tiempo. Así, vence lo que vive, a los miedos que le abrazan. Se marchó con la semblanza, del amor que se quedaba. Y descubrió en la mirada, el miedo que se llevaba. Se fue, en la espuma blanca, de las olas de la vida. Cantando se fue sin prisa, porque la vida es efímera. El miedo cuajó en el verbo. Y el amor, rompió la cincha, que ceñía sus anhelos. Y el corazón fue latiendo, al ritmo que el verbo anhela. Vivió, mirando por dentro, como se mira el recuerdo. Y amó, como ama un poseso. Amor, que vences al miedo, con tu recia cimitarra. Y a mandobles van abriendo,

  NOCHE AMIGA... Dime, noche amiga, háblame entre la niebla. Cuéntame en la negrura, de tu oscura ternura. Llámame a tu guarida, que amándote quisiera, morir como una idea. Cántame, amada mía. Suéñame con tus sueños, amor de fantasía. Y dame la alegría, de vivir tus anhelos. Ámame, noche amiga, con tus poderes níveos. Y abrázame sin prisa, entre tus brazos tiernos. Así pasan los días, mientras la noche duerme. Noche amiga que miras, entre tus sombras, sola. Y el tiempo se entretiene, jugando con la vida. Ganando la partida, mientras la noche duerme. La sombra ya rebota, entre las vivas luces. Y las estrellas lucen, de gala sus vestidos. Quedan en el olvido, las voces más ilustres. La noche amiga dobla, la vida que se extingue. Noche amiga que vives, del amor que revive, en tus mágicos sueños. Dime, antes que me olvide, como se ama lo auténtico. En tu negrura, abrázame, entre tus brazos níveos. Y, deja que suspire. Noche amiga que vi