RIMAS QUE AMAN



Entre nubarrones,

se esconde el abismo.

Tras la negra sombra,

se aloja el destino.

Y en las luces pálidas,

opacas y tránsfugas,

vive la penumbra,

que opaca la aurora.



La voz se ha pausado,

para oír la calma.

Y el silencio es nítido,

como la mañana.

Y al borde del miedo,

se ha asomado el alma.

Y el silencio vívido,

ha embriagado el alba.



Transparente el viento,

que en silencio habla.

Mientras las cigarras,

entonan su canto.

Un chisporroteo,

de agudas llamadas.

Amables las sendas,

que huelen a albahaca.



El amor efímero,

que a la puerta llama.

Entona entre gritos,

un canto que clama.

La canción más íntima,

se ha quedado huérfana.

Y no espera el tiempo,

ni a la voz más ínfima.



Canciones de invierno,

de frías escarchas.

Se acurruca el verso,

entre las almohadas.

Y al llenar el hueco,

que deja el silencio.

Voces cantarinas,

vuelven a nombrarlas.



El espeso lienzo,

de tela de araña.

Ha atrapado al beso,

que libre volaba.

Se ha fruncido el tiempo,

con hilos de plata.

Y el amor ha vuelto,

para ver su cara.



Canciones de antaño.

Canciones de ahora.

Mientras versos flotan,

sobre las palabras.

Y el amor inmenso,

que desprende el alma.

Se fue caminando,

entre rimas que aman.



Angel L. Perez ®

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22/01/2023

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