AMOR, DE MÚSICA AUTÉNTICA


Canción de cuna que cura,

melodía que acompaña,

amor que no es prisionero,

amor, que libre se abraza,

a los ateridos cuerpos.

Canción de cuna que calma,

melodía que arrebata,

tonadilla de piruetas,

que hace bailar a quien pena,

con el ritmo de su gracia.


El cantarín manantial,

entre las rocas se afina,

alegre, baja sin pausa,

acompañando los trinos,

de las aves en la ramas,

mientras murmuran las hojas,

inexplicables palabras,

las voces del bosque acuden,

para acompañar al agua.


Senderos en las marañas,

de trampas entrelazadas,

insidias que se retuercen,

sobre las mentes pacatas,

la música de sus roces,

arrítmicas se enmarañan,

entre las voces sin nombre,

que camuflan las palabras,

que enredan notas auténticas,

que a lo más nítido embarran.


El miedo es la letanía,

que paraliza y doblega,

canción que vence y apresa,

con las garras de su credo.

Canción tenebrosa y terca,

que torna a terror el miedo,

con las voces cavernosas,

de siniestros mensajeros.

El miedo atenaza y sangra,

con sus nefastas palabras.


Canción de cuna que mima,

canción de amor que subyuga,

canción que cruza fronteras,

y al volar su voz aumenta,

canción que rompe las reglas,

canción que no quiere ofensas,

amor, que en canción se muda,

para deleitar con ella,

canción que no tiene fin,

amor, de música auténtica.


A.L. (ángel l. pérez)

NO SOY LO QUE ESCRIBO...SOY, LO QUE TÚ SIENTES AL LEERME

(anónimo).

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20/04/2021

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