
LA ALEGRÍA. Una risa espontánea, Una risa en cascada. Un torrente de notas, que llenaba la estancia. La límpida mirada, a la risa acompaña. Y en sus ojos destaca, la ternura que emana. Hipnótica y profunda. Seductora y amable. Como abraza el que sabe, que su abrazo arrebata. En sus labios de fresa. Su risa es melodía. Sinfonía de violines, que al oído regala. Como ríen los niños, cuando el juguete baila. Contagia alegría, su risa aniñada. La risa que habla. La risa que ama. La risa que abraza. La que nos altera. Que atrae otras risas. Su energía propaga. Y al alma más seria, que intenta evitarla. Su risa la embriaga. Camina despacio. Con esa cadencia, que da la elegancia. Sus gráciles brazos, ágiles navegan. Velas de un velero, que al viento aletean. Ritmo acompasado. Como en una orquesta. Cometas que danzan, al albur de viento. Sin prisa, con calma. No afecta a su acento No eleva su rostro, como si desafiara. No exhib...